Preguntas más frecuentes sobre la fimosis
No es solo cosa de niños. Hay muchos adultos que la sufren, con los dolores y problemas que ello conlleva. La estrechez de la piel que impide descubrir el glande y puede provocar infecciones urinarias, dolor durante el acto sexual, así como hacer a quien lo padece más vulnerable a las enfermedades de transmisión sexual. Si se requiere cirugía, la operación es muy simple y en cuatro o cinco días se retoma la vida normal aunque hay que evitar esfuerzos o ejercicios físicos que puedan traumatizar el área operada durante unas 2 o 3 semanas.
¿Qué es la fimosis?
La fimosis es la incapacidad de descubrir el glande (cabeza del pene) en estado flácido y/o erecto, debido a la estrechez de la piel (prepucio) que lo cubre. Puede ser una condición congénita (hereditaria) o adquirida (que ocurre después de infecciones o heridas en el pene). La fimosis se puede presentar a cualquier edad: niño, joven o adulto.
¿Qué es la parafimosis?
En los casos más severos de fimosis, puede ocurrir que con la erección, el prepucio retraido no puede ser empujado hacia adelante, para cubrir nuevamente el glande. Este estrangulamiento se llama parafimosis, es muy doloroso, peligroso, y requiere de una cirugía de emergencia para evitar un corte circulatorio hacia el glande.
¿Cuáles son las consecuencias de la fimosis?
- Dificultad para la micción, pudiendo provocar infecciones urinarias.
- Dolor durante la relación sexual.
- Dificultad para la limpieza completa del pene, lo cual causa la acumulación de esmegma (secreción blanquecina producida por glándulas sebáceas del prepucio).
- Mayor posibilidad de adquirir enfermedades de transmision sexual (ETS).
- Parafimosis (estrechamiento tal que imposibilita volver a cubrir el glande).
¿Por qué la fimosis requiere un tratamiento quirúrgico?
- Para permitir la higiene adecuada del pene.
- Para permitir el gozar de relaciones sexuales satisfactorias.
- Para evitar o corregir la parafimosis.
- Para disminuir el riesgo de balano-postitis (infecciones del prepucio y glande), infecciones urinarias, enfermedades venéreas y cáncer del pene.
- Para disminuir el riesgo de cáncer del cuello de útero en su pareja sexual.
¿Qué porcentaje de los niños requiere la cirugía?
Se estima que más del 18% de los niños no-circuncidados, hasta los 8 años de edad, pueden tener indicaciones médicas para realizar la cirugía.
¿Cómo se hace el tratamiento?
El tratamiento se hace a través de una cirugía muy simple y rápida llamada circuncisión (o postectomía), en la cual se corta y retira el prepucio, que es el trozo de piel que normalmente cubre al glande. Existen diversas técnicas para realizar esta operación, y en todos los casos el resultado es que el glande queda permanentemente descubierto. Esta cirugia de hace con anestesia local en adultos, y con anestesia general en niños, y se dan de alta el mismo día (procedimiento ambulatorio, sin internación hospitalaria).
¿Cuándo es necesaria la cirugía?
- Infecciones frecuentes en el pene, y en la orina.
- Dolor y dificultad al orinar.
- Dolor durante las relaciones sexuales.
- Presencia de parafimosis.
¿Hay una contra-indicación para realizar la circuncisión?
Está contra-indicada para todos los niños que nacen con una deformidad peniana, llamada hipospadias. Esta es una malformación congénita en donde la terminación de la uretra (canal urinario) se ubica en la cara inferior (ventral) del pene, en lugar de la punta del glande.
¿Cuál es la mejor edad para circuncidar a un niño?
La edad ideal comienza cuando el niño ya no use pañales y tenga control total de la micción. En términos médicos, la cirugía más precoz se reserva para los casos en que hay infección en el pene, ya que existe una fimosis fisiológica (normal) el 80% de los bebés menores de 6 meses. Sin embargo, se recomienda en lo posible esperar hasta el período comprendido entre los 7 a 10 años, ya que hasta los 6 años, el niño está en pleno proceso de identificación sexual (fase fálica), y por lo tanto, a partir de los 7 años el niño ya puede entender las razones, y no corre el riesgo de creer que le "cortaron" un pedazo de su pene (síndrome de castración). En todo caso, se sugiere realizar la operación antes de la adolescencia (antes de los 12 años), ya que en esta etapa las erecciones son más enérgicas y frecuentes, y hacen el post-operatorio más doloroso y complicado. Las mayores causas de una cirugía en la fase adulta son: fimosis no tratadas en la infancia, infecciones genitales, enfermedades de transmisión sexual, y el deseo propio del paciente (estético, higiénico, etc.).
¿Cómo pueden los padres preparar a su hijo para la cirugía?
En primer lugar, los padres deben asegurarse de recibir información y orientación completa del urólogo, que les permita conocer cómo será realizada la cirugía, para que se sientan seguros y puedan transmitir esa confianza y tranquilidad a su hijo. Además, es muy importante no mentirle al niño, sino decirle en forma cariñosa la verdad de qué es lo que se va a hacer, pero sin entrar en detalles innecesarios que el no va a comprender y que lo pueden asustar (evitar, por ejemplo, la palabra "cortar"). También es una buena idea llevarlo previamente, si es posible, al lugar donde se realizara la cirugía, para que se familiarice y se vaya preparando.
¿Quiénes son los médicos indicados para realizar esta cirugía?
Los UROLOGOS son los especialistas habilitados para realizar la circuncisión.
¿Cómo se hace la cirugía?
La circuncisión es un procedimiento ambulatorio, es decir, el paciente no necesita quedar internado y no va a dormir en el hospital. Respecto a la técnica quirúrgica, esto varía según la edad del paciente, la gravedad de la fimosis, y la propia experiencia del cirujano.
¿Los padres pueden asistir a la cirugía de su hijo?
En los niños mayores de 6 meses, es importante que un familiar permanezca junto a él hasta que se duerma, para que se sienta seguro. En algunos hospitales, se permite y se incentiva la permanencia de los padres al lado del niño durante la inducción anéstesica. Durante el acto quirúrgico, la presencia no está permitida, para así disminuir los riesgos de infección y evitar trastornos a la rutina de la sala quirúrgica. En la sala de recuperación post-anestésica, los padres pueden permanecer al lado de su hijo, tranquilizándolo después que despierte.
¿La anestesia es local o general?
En la infancia y adolescencia, se prefiere la anestesia general (sin intubación ni respiración asistida), usualmente precedida del uso de un sedante y un analgésico, ya que:
- Evita que el paciente vea, participe y se asuste durante el acto quirúrgico.
- Evita el dolor de los pinchazos de la aguja con el anestésico local.
- Permite que el paciente permanezca quieto, sin moverse durante la cirugía.
- El paciente no recordará nada de lo que ocurre el la sala de cirugía, evitando así un posible trauma psicológico.
- Es un procedimiento muy seguro: el riesgo de complicaciones severas es inferior a 1 en 5.000 anestesias.
En el caso de adultos (mayores de 18 años), usualmente se aplica sólo anestesia local, muchas veces con el apoyo de un sedante intravenoso.
¿Después de la cirugía, en cuántos días puede el paciente volver a la escuela o el trabajo?
En lo posible, se intenta operar un día Jueves o Viernes, para que así se puedan recuperar en reposo durante el fin de semana, y retornar al trabajo o la escuela tranquilamente el Lunes siguiente. Sólo hay que evitar esfuerzos o ejercicios físicos que puedan traumatizar el área operada por 2 a 3 semanas.
¿Existen problemas post-operatorios en una circuncisión?
Como los resultados son habitualmente muy buenos y permanentes, siendo rarísimas las complicaciones, no hay problemas importantes. Lo que generalmente ocurre es un periodo corto de readaptación en relación a la híper-sensibilidad del glande descubierto. Con el paso de los días y el hábito, la exposición permanente del glande y el roce directo con la ropa disminuye esa híper-sensibilidad, lo cual en ningún caso afecta la capacidad de sentir placer en el acto sexual. Al contrario, es mucho peor sentir dolor y molestias por una fimosis, frenillo corto o por un prepucio muy largo.
¿La fimosis no tratada puede perjudicar la vida sexual?
Si hay dificultad para descubrir el glande - en especial cuando ocurre la erección - el portador de fimosis seguramente se sentirá incómodo o adolorido durante la relación sexual. Lo mismo puede ocurrir si la persona tiene un prepucio muy largo. En estos casos, definitivamente hay perjuicio para el ejercicio de la sexualidad, ya que no sólo tendrá limitada la capacidad de sentir placer, sino también tendrá un pene con mal olor y bastante secreción. Muchas veces, el mismo temor de que va a sentir dolor, o bien, la vergüenza de no tener un pene limpio y descapullado hacen que el portador se sienta disminuido en su auto-estima, lo que lleva a evidentes problemas sexuales e incluso a una disminución del deseo.
¿En una circuncisión también se corta el frenillo?
Generalmente la circuncisión incluye el corte del prepucio y del frenillo también, aunque esto depende de la técnica del cirujano y - a veces - de la preferencia del paciente.
¿Qué es el "prepucio redundante"?
Algunos hombres tienen el prepucio muy largo, en el cual la piel forma una "trompa de elefante" delante del glande. Muchas veces, esta situación dificulta la adecuada higiene del pene, provocando el surgimiento de frecuentes cuadros de infección. Además, el prepucio largo puede impedir que - incluso en erección - el glande no se descubra, lo cual puede afectar negativamente la capacidad de experimentar placer en un acto sexual. En estos casos, aunque no haya fimosis, es muy usual que se indique la circuncisión como tratamiento.
¿Cuáles son las ventajas médicas de la circuncisión?
Corrige el problema de la fimosis, previene la posibilidad de infección urinaria, previene la ocurrencia de inflamaciones e infecciones en el pene, reduce el riesgo de padecer cáncer al pene y reduce el riesgo de la ocurrencia de ETS (enfermedades de transmisión sexual), incluyendo la transmisión del virus del SIDA.